Mas transfondo de parte de la genial E. Skye Chaney sobre los liberi y sus vecinos del submundo...los creeps.
Traducido por google.La entrada original aqui en Alien Dungeon.
La sangre y los dientes
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EmailCáliz vio la sangre que talló un camino espantoso a través de la tierra. Retrocedió a toda prisa como su curso acercó a sus cascos. Él no fue ajeno a la sangre, pero esta fue su primera matanza Eun. Todavía agarrado el cuchillo en la mano, los nudillos mostrando blanco. Se obligó a relajar su agarre, estirar los dedos. Cáliz no estaba familiarizado con la muerte. La muerte era un compañero constante en el Swarthmore, alzándose en cada piedra, debajo de cada parche aún de hierba. Pero nunca antes había Cáliz causó una muerte y sintió cómo la sangre caliente es la vida. Él nunca antes había visto los ojos oscurecerse o observado un cuerpo últimos movimientos frenéticos, contracciones. El
Eun había querido vivir, sino que había luchado por la vida desde el
momento de la manada manchado Cáliz y su Cheveyo, el sonido de los
cascos había sido todo lo necesario para enviar los pájaros gigantes al
galope en pánico, y la persecución había comenzado.La
emoción de la persecución había llenado Cáliz durante unos pocos
momentos de gloria, mientras empujaba su cuerpo hacia adelante después
de los pájaros, sintiendo que su juventud y fuerza en cada movimiento. Miró
con ojos enfocados como algunos de los Eun estuvo por detrás del rebaño
corriendo; él apuntó uno y el resto dejó de existir para él. Sacó
el cuchillo de su vaina en la cintura y obligó a sus piernas a moverse
cada vez más rápido, hasta que pudo lavarse las plumas brillantes con
sus dedos. Más velocidad. El
Eun estaba mirando hacia él, sus ojos desorbitados y rodando en la
cabeza, las dos piernas a la falta de definición por debajo de su cuerpo
palpitante.Y
luego se había pasado el Eun tropezó, sus piernas debajo de torsión, y
fue estrellarse contra el suelo en un montón, rodando por el suelo
polvoriento. Un
rayo de miedo se había estremecido a través de la sangre del cáliz ",
dejando a su hormigueo en la piel y la boca seca cuando vio las garras
gigantes de las aves, golpeando y buscando carne para alquilar, y el
pico, rompiendo abierto y cerrado, un emisor de chillido impío de la bestia garganta.Cáliz pasó la mano por la herida. Una herida menor, probablemente no requieren curación. Él
no había vacilado, a pesar de que rayo de miedo, y él había cortado el
pájaro a través de su cuello largo y delgado, con el cuchillo que había
estado afilando durante quince días en preparación. Su hoja había golpeado verdad, y la vida se separaron vena bajo su acero con facilidad. Como él retrocedió, garra del ave había azotado a través de su torso, dejando un rastro de sangre de largo. Sólo un golpe de refilón, en verdad, guerreros Liberi a menudo eran gravemente herido por los pájaros. Cáliz ofreció unas palabras de agradecimiento a los dioses, y finalmente volvió a mirar a su Cheveyo. El guerrero no había hablado desde que había empezado la caza, como era costumbre. Pero Cáliz era consciente de él. El
centauro era enorme, y su cuerpo lleno de cicatrices, su torso y
curtida cara del sol de Hunts muchos, con la cabeza coronada con plumas
de muchas muertes. Taryn fue uno de los guerreros más respetados de su tribu, y su presencia en el banquillo del cáliz era un honor magnífico. Observó Cáliz ahora desde la distancia, los ojos negros entrecerrados y alerta, con la mano siempre en el arma. Se puso de pie con la cabeza y el torso elevado, sus pezuñas constante. Cáliz sacó fuerzas de su presencia silenciosa.Había sido una muerte limpia, un orgullo podía ofrecer a los dioses de la manada. Murmuró las palabras mientras su cola sacudió a las moscas, ya elaborado por la sangre fresca. Las
oraciones llegaron sin pensar, sino que se había hablado en su
presencia, ya que su vida comenzó, hace 14 años, cuando su madre le dio a
luz a la tierra implacable de la Swarth. La
suya era una existencia de ninguna opción, incluso cuando él no era más
que un potro maullido, aprender a controlar sus extremidades. Él sería un guerrero Liberi, y se protegería la Swarth y honrar a los centauros. Entraría en los juicios a los catorce años, y él aprendería a matar. Y él encontraría la gloria en la muerte.
Las oraciones habladas, cogió el cuchillo en la cintura. Sus manos temblaban mientras se acercaban al Eun caído, y lo llenó de vergüenza. Un guerrero Liberi no debe mostrar debilidad. Un Eun era una bestia casi sin cerebro, y su carne y plumas que mantener a su rebaño, la muerte del ave era necesario. El
grito familiar de un Dubh Lon saludó a sus oídos, y miró hacia el cielo
para ver compañero de Taryn dando vueltas por encima, las plumas de las
aves que brilla en la luz del atardecer. Cáliz aún no ha recibido su cría Lon Dubh, y anticipó el evento más que ninguna otra de las celebraciones de Primera Instancia. A Lon Dubh era compañero más confiable y honrado el Liberi de, los pájaros elegantes un regalo de los dioses. El
Dubh Lon dotado a Calyx tras la finalización de sus pruebas sería su
compañera de toda la vida, que se eleva en el cielo de cada uno de sus
Hunt.Cáliz volvió los ojos hacia el suelo y la tarea sangrienta mentir ante él. Se
puso a trabajar con movimientos rápidos, la eliminación de las primeras
plumas más valiosas, que serviría como el primer trofeo de sus ensayos.
Cortó la carne del ave, retirar la carne más sabrosa y más cordial siguiente. Se tomó su tiempo, con cuidado de envolver la carne en cuero hervido y guardarlo en la mochila. Taryn mantuvo a distancia, siempre en silencio. El
Dubh Lon descendió y se posó sobre una su roca, inclinando la cabeza
ante Taryn expectante, sus ojos inteligentes lo observaba con frialdad. Cáliz cortó un pedazo de la más exquisita carne y se la ofreció al pájaro. Arrancó
en la carne con el pico y se lo tragó en dos bocados, y luego se lanzó
fuera de la roca, volando a Taryn y aterrizaje en el hombro amplio. Cáliz observó cómo Taryn levantó la mano en un gesto de honor y buena voluntad. Él
hizo lo mismo, y se quedaron así durante un momento, el viejo guerrero
que reconoce a los jóvenes a través de la Swarth, el sol descendiendo
rápidamente en su cuadro. En ninguna parte se reduciría a la oscuridad pronto. Entonces,
el momento pasó, y Taryn dio la vuelta, tomando a todo galope hacia el
campamento de su tribu, el Dubh Lon empujando al aire y siguientes. Cáliz estaba solo. Reunió a su mochila y se dirigió en la dirección opuesta, más en el Swarthmore, dejando los restos del Eun detrás de él.Él
no viajó mucho tiempo, sino que optó por establecer un campamento
enclavado entre unas rocas, que proporcionarían protección a los
residentes durante la noche de la Swarth. Los
restos de un fuego Cáliz dijo que Liberi otro había utilizado antes
este lugar, probablemente potros otros sobre sus ensayos. Su presencia pasada trajo consuelo a Calyx como una hoguera y preparó la carne Eun. Era tradición Liberi a pasar una noche en la Swarth solo después de la primera muerte, en la reflexión silenciosa y la oración. Las lunas de ninguna parte se elevó en el cielo, proyectando su luz tenue a través de la Swarth. Al festín, la quietud de la noche comenzó a llegar a lo largo de su piel. Cáliz no estaba acostumbrado a ese silencio. Campamento
de una tribu Liberi nunca fue silencioso, ya que estaba lleno de gritos
y hablando, la obra de los jóvenes, y el estruendo de los fuegos. Sintió una gran inquietud y sacó el cuchillo de su cintura, por la que se con cuidado a su alcance.Un sonido interrumpió el silencio, muy suave, como un reguero de piedras que se desplazan por el suelo. Cáliz
sentía que estaba siendo vigilado, un sentimiento tan fuerte que llegó a
sus cascos, cuchillo en mano, y poco a poco se dio la vuelta, su cola
espasmos de ansiedad. Allí,
de pie sobre una roca detrás de él era una criatura horrible, cuatro
mano se extiende por alto, con sólo un ojo gigante, observándolo. La boca de la cosa estaba abierta, mostrando los dientes afilados. Olía a la enfermedad y la podredumbre, la carne se deja al sol demasiado tiempo. Cáliz arrugó la nariz con disgusto a la cosa asquerosa. "Anda, vete de aquí!", Gritó, y él lanzó una piedra en su dirección. La cosa se quedó mirando, sin moverse. Y de repente apareció otro lado, esta agarrando un club. Cáliz
vio con horror como varios más subió desde detrás de las rocas, todo lo
miraba con sus ojos, enormes y vacíos, sus dientes afilados brillando.
To be continued ...
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